Multitudinaria concentración en protesta por las agresiones a trabajadoras en El Carmen

Reclaman condiciones de seguridad básicas, garantizar la atención de calidad sin riesgos para la integridad física y psicológica de la ciudadanía y profesionales; y espacios terapéuticos dignos  


REDACCIÓN 

Esta mañana se ha celebrado la concentración convocada por los trabajadores del Centro de Especialidades Virgen El Carmen en protesta por las agresiones sufridas por las profesionales de la unidad de Salud Mental. A las puertas del centro se han dado cita numerosos trabajadores, junto a representantes sindicales y ciudadanos particulares que, con su presencia, han querido dar su apoyo ante la delicada situación que vienen sufriendo.

La protesta ha sido respaldada por trabajadores, representantes sindicales y ciudadanos particulares

Fue la semana pasada cuando se produjeron nuevas agresiones a trabajadoras de la unidad de Salud Mental por parte de un usuario que, de manera violenta, solicitó atención cuando no le tocaba, amenazando e insultando a las profesionalesgolpeando el mobiliario de la sala e, incluso, llegó a lanzar su propio teléfono a una de las trabajadoras. Situación que ya ha sido denunciada y que ha provocado que seis trabajadoras estén dadas de baja.

Durante la concentración se ha leído un comunicado donde han querido dejar claro que este parón en su actividad laboral "no deriva de un impulso individualista ni de una falta de responsabilidad con las personas que atendemos. Todo lo contrario. Surge de nuestro compromiso consciente con una práctica clínica ética y de calidad, para lo que se precisan unas condiciones mínimas que garanticen un espacio digno seguro, tanto para la ciudadanía como para las profesionales".


Continúan afirmando que "el episodio de violencia vivido la semana pasada no es un hecho aislado, sino el reflejo de una situación estructural de vulnerabilidad y violencia institucional mantenida", y subrayan que lo que vienen solicitando son "unas condiciones básicas para que el trabajo sea posible. La presencia de un profesional de seguridad, un control mínimo de accesos y una revisión de los circuitos de atención no son lujos: son requisitos para proteger la relación y el vínculo asistencial".

"Nadie puede, ni debe, trabajar sintiendo terror, pánico o indefensión, como hemos sufrido en esta última ocasión, y en tantas otras. Aún más, ninguna persona que pide ayuda y deposita confianza en nuestro servicio, debería verse expuesta a repetir estas vivencias en el lugar al que acude para sanar heridas previas", indican en el comunicado, donde solicitan de manera concreta "condiciones de seguridad básicas que nos permitan trabajar; garantizar la atención de calidad sin riesgos para la integridad física y psicológica de la ciudadanía y profesionales; y espacios terapéuticos dignos". 


Comunicado